Tu nombre va por delante: cómo construir una reputación que trabaje por ti


Tu nombre va por delante: cómo construir una reputación que trabaje por ti

La pieza de la semana

Tu nombre va por delante

Todavía recuerdo el día en que todo cambió. Una colega con la que apenas había conversado me recomendó para un proyecto estratégico con un gerente de cuenta con el que yo nunca había trabajado. “Sé quién eres por lo que otros dicen de ti”, me dijo este gerente, una persona jovial y tremendamente inteligente. Alguien que, luego de haber hecho esa transacción con él, se hizo muy amigo mío. La persona que me recomendó no era una amiga cercana, ni habíamos trabajado juntos en gran medida. Solamente sabía de mí por comentarios de amigas de ella, de personas con las que sí había trabajado y con quienes quizás, tuve gestos que sumaron a favor mío.

Ese día entendí que mi nombre caminaba por delante de mí.

En el mundo laboral, uno no solo es lo que hace cuando está presente, sino también lo que deja cuando no está. Tu reputación no se construye en grandes discursos ni en hojas de vida pulidas, llenas de títulos, sino en cómo tratas a otros, en cómo cedes el crédito, en cómo sostienes tu palabra en lo cotidiano.

Hoy quiero que mires tu carrera como un camino que no soloamente avanza con logros visibles, sino con una sombra que te precede: tu reputación. ¿Qué dice tu nombre cuando tú no estás?

Conexiones inesperadas

Lo que dejas cuando te vas

En mi libro, en la pieza 3 Nadie sabe para quién trabaja, invito a mis lectores a reconocer algo esencial: la longevidad laboral ya no se mide en años, sino en vínculos y relaciones. Tu nombre siempre te precede, y por eso es vital cuidar lo que haces, cómo lo haces, y para qué lo haces.

El libro nos muestra que construir una carrera sólida no es cuestión de títulos ni de cargos, sino de pequeñas acciones sostenidas en el tiempo. Dar crédito a otros, decir “lo reviso” en lugar de “eso no se puede”, o simplemente escuchar antes de opinar, son formas silenciosas —y poderosas— de tallar tu nombre en positivo.

Tu nombre es tu firma en el mundo profesional. No se trata de ser perfecto, se trata de ser confiable, y más que eso, una palabra del inglés que me encanta "accountable", más hoy cuando eso cada día es menos visible. Empieza por comprender que estás dejando una huella, incluso sin darte cuenta.

Caja de herramientas

El espejo de tu reputación

Quiero dejarte esta herramienta sencilla y poderosa: el “Espejo de tu nombre” para que veas si la imagen que proyectas es la que se refleja.

Una vez por semana, hazte estas preguntas:

  • ¿Fui hoy la persona que otros recomendarían?
  • ¿Qué decisión tomé esta semana que fortaleció -o debilitó- mi nombre?
  • ¿Qué comentarios podrían hacer de mí quienes no me conocen directamente?

Responderlas con honestidad te ayudará a ajustar el rumbo.
La reputación no se construye con palabras, se construye con hábitos y con hechos. Haz de estos ejercicios una práctica y verás cómo tu nombre se convierte en una puerta que se abre, incluso cuando no estás presente.

¿Quieres explorar más herramientas prácticas relacionadas con este tema? Descúbrelas en mi más reciente libro, el podcast, las meditaciones o escríbeme directamente por WhatsApp.